¿Cómo escojo el título de mi novela?

Esa es la gran pregunta que se hacen todos los escritores. Pero en ocasiones la chispa que motiva la creación empieza justamente ahí, en el título. Da cuenta del nudo principal de la historia y crea curiosidad al lector, en definitiva vende la novela.

No hay reglas específicas para dar nombre a una novela. Todas las posibilidades están abiertas a la imaginación del escritor, aunque muchas veces será el editor quien, por motivos comerciales, acabará dando nombre al libro.

Un libro que se llame "Me siento solo" puede que no trasmita nada al público. Pero si modificamos la portada con un hombre entre una multitud y sentado en una silla, quizá captemos la curiosidad del potencial lector. El resto será cuestión de acabar de seducir el bolsillo. Todos formamos parte de ese proceso de seducción lectora comercial.

El título debe condensar en pocas palabras todo un escrito, algo que no resulta sencillo y trae grandes quebraderos de cabeza.

Como metáfora de la acción narrada, Metamorfosis es sin ninguna duda un buen título para una novela que implica transformación física de un personaje.

Pero el título podría indicarnos directamente el conflicto sobre el cual girará la trama: Harry Potter y la piedra filosofal, Crónicas de una muerte anunciada.

El objeto que motiva la acción y sobre el cual recáe toda la importancia de la historia también ha dado nombre a muchas novelas. Excalibur la película dirigida por John Boorman sería ejemplo de ello. En otros casos se suele recurrir al binomio fantástico de objeto-personaje. Dícese de "el gato con botas".

¿Son originales los argumentos del cine?

Platón diría que los argumentos son originales siempre que tengan una continuidad narrativa o sean fruto de un legado anterior o nuevo. En los siguientes post que iré presentando escribiré cuales son los mitos sobre los que se basan los argumentos de las películas y novela. Los argumentos fundacionales que han dado lugar a infinidad de historias.

Para realizar este análisis he leído afanosamente el libro de Jordí Balló y Xavier Pérez.
"La semilla inmortal. Los argumentos universales en el cine"

Rafael Alberti - entrevista soler serrano - 1


Entrevista al escritor Rafael Alberti. Su vida y su obra.

Disfrutad de esta entrevista, documento histórico y testimonio de uno de los escritores más importantes del siglo XX.

Entrevista a Eduardo Mendoza



El escritor Eduardo Mendoza nos revela sus secretos como escritor y cómo la historia afectó a su trayectoria profesional.

Entrevista al Escritor William Ospina




En este video descubriréis los secretos del escritor William Ospina.
A partir de ahora cada semana os recomendaré videos que os darán más pistas sobre cómo llegar a ser escritor.

Diferencia entre mostrar y decir

En la novela o el relato no se dicen las cosas que suceden, sino que se muestran

No es lo mismo decir:
Juan tiene miedo. (decir)

La puerta se cerró a su espalda y su corazón latió con fuerza. Aquel ruido de cadenas que se arrastraban en el piso de arriba no tenía ninguna explicación. No se atrevió a dar un paso y sus manos tantearon en la oscuridad la pared fría y... (mostrar)

Creo que es un error muy común y es bastante dificil darse cuenta. Suele ser un trabajo a tener en cuenta cuando se hace revisión del manuscrito y a mí me resulta árduo complicado en ocasiones.

¿Por qué? Porque también depende de lo que estemos escribiendo y a qué queremos darle más o menos importancia.


La diferencia básica es que en la vida diaria solemos decir las cosas, pero en un relato debemos mostrar.

Decir: Hace mucho  frío.
Mostrar:  Una fría brisa recorrió su cuerpo y cerró los ojos una vez más...


Si tienes presente el concepto mostrar-decir te será mucho más fácil crear atmósfera y mejorar tu estilo, y por lo tanto tus escritos.

Seguiremos profundizando en este y otros temas.

Si queréis podéis sugerirme una temática concreta del proceso de escritura y escribiré otro post sobre esas cuestiones.

Escribir sobre tu propia vida

Muchos escritores creen que escribir es contar cosas "reales" que han vivido.

Es interesante utilizar tu propia biografía pero hay que tener cuidado.

Las experiencias, vivencias pueden ser convertidos en novela cuando se le añade algo más para que resulte realmente literario.

No tengas reparo en añadir, mezclar, inventar a favor de la historia. Si has tenido una experiencia en un viaje puede resultar interesante para contársela a tus amigos en una cena. Pero para novelar quizá tengas que añadir algo más, para llevar al límite la acción y el objetivo del personaje.

Si prefieres escribir sobre temas costumbristas también debes de vigilar la coherencia de las relaciones personales. Aunque aparentemente nos quejamos de que la gente actúa por impulsos, en realidad siempre existe debe existir algo de fondo que motiva a alguien a actuar de una determinada manera.

Cuando evoques un pasado de tu vida recuerda que debes escribir no solo lo que ves. También lo que tocas, lo que oyes, el olor de las cosas. El recuerdo nostálgico se consigue con esos elementos.


Ejemplo pobre: Me acordé de las galletas de mi madre y me puse a llorar.

Ejemplo mejorado: El olor a canela y las manchas de aceite sobre el marmol me evocó las tardes de primavera en que mi madre preparaba galletas para nosotros. Acaricié las paredes frías de la casa que tantos años atrás era tan acogedora... me puse a llorar....



¡Necesito tu ayuda!

¡Shhhhhh!
¡Lee en voz baja y no hagas ruido que mi escritor se va a despertar! ¡Necesito tu ayuda!

Soy Justavo Gallofa Melone y estoy en peligro!!!!

Antes de que este escritor perezoso y de pacotilla, Carlos Richarte, se despierte, quiero deciros que me he colado en su blog para suplicar ayuda a vosotros navegantes. Necesito que todo el mundo sepa lo que me está pasando y la gravedad de mi situación. Injustia, represión, mareos y desviación de la columna.

Mi vida es una estupidez porqué este escritor de pacotilla no se decide a escribir de mí de una vez. Lleva no sé cuanto tiempo con estructuras y con tramas y no sé que hortalizas en vinagre.

Estoy desesperado y no aguanto más, denle papel higieníco, una ticket del carrefour, papel cebolla o pinocho lo que sea pero que por favor que escriba ya. Qué cuente mis alucionaciones, mi primera experiencia con el colutorio o mi viaje al desierto de Paquepintas. ¡Qué escriba ya!


Y yo aquí esclavo de un tipo que se pasa el día trabajando en otras cosas menos en mí. Eso sí, para ir al gimnasio y tocar la bandurria si que tiene tiempo el muy... Sí, dice que es para ganarse la vida pero y yo qué, yo la estoy perdiendo. Estoy jodido porque pasan los días y siempre anda liado con buscar el estilo literario, con la trama... ¡Venga ya! Vete al tramaumatólogo y que te cuente de puntos de giro!!!

Carlos Richarte en el fondo es buen chaval, pero en el fondo de un pozo. Tampoco puedo prescindir de él pero tú puedes ayudarme.

¡Déjame salir! ¡Quiero vivir! ¡Cagarme en los parques como un chucho! Lo que sea pero quiero salir al mundo real!

Shhhh!!! No haced ruido!

Si le cuentas a algún amigo que estoy en peligro quizá logremos converle para que se dé un poco más de prisa.

¡¡¡Quizá entre todos podáis rescatarme y consiga salir de aquí!!

Intentaré regresar pronto una noche que Carlos Richarte duerma plácidamente.
¿Por qué lo eligí a él? Eso me pregunto yo desde hace años.

  1. Este mensaje no se autodestruirá.
  2. Manténgase al alcance de los niños y las niñas.
  3. En caso de duda no consulte a su farmacéutico y a ser posible hágase seguidor de este blog.

¿Qué es la trama?

La trama es la manera en que es presentado lo que sucede en la novela o cuento.

Serían aquellos hilos que están entrelazados y forman la historia. Para el escritor significa la total libertad pero también un reto muy dificil.

Una trama es como un tejido donde todos los hilos están perfectamente entrelazados hasta crear una historia singular y única.

Nuestra propia vida no deja de ser una trama donde todo está unido por un mismo eje temporal y de acción.

Para desarrollar la idea de una novela es necesario crear una trama donde todos los hilos estén perfectamente entrelazados.

Hazte preguntas antes de escribir

Antes de escriber hazte preguntas y así encontrás la idea central de tu historia.

¿Por qué este rumbo en la historia?
¿Dónde ocurren los hechos?
¿Cómo ocurren?
¿Quién es el protagonista?
¿Cuál es el nudo principal de la historia?
¿y las historias secundarias?
¿Qué otros personajes estarán involucrados y por qué razón?
¿Qué obstáculos encontrará el protagonista?

La pregunta mágica que debes hacerte es ¿Por qué?

Seguro que cuando que alguna vez has pensado que buena idea para una historia. O quizá para el guión de una película. Ese momento tan especial ocurre de repente como un flash, una intuición, una revelación casi espiritual o divina...

Por ejemplo:

Hace unos días se me ocurrió una red social que resultaría revolucionaría. ¿Qué pasaría si alguien inventase una red social como Deadbook donde fuera posible ponerse en contacto con los muertos al módico precio de 1$ al mes...

La idea es absurda y seguramente imposible, (por el momento) pero para una novela abre un universo infinito de posibilidades.

La novela surge de repente como un volcán que europciona dentro del escritor. Seguramente la novela es un ente que invade la cabeza del escritor y que lo utiliza como medio para dar la luz.

La idea puede ser un persona, una frase, un lugar, un deseo, un anuncio, una coincidencia... todo puede ser el origen para iniciar esa historia. Otra cuestión será como estructurar la novela que queremos contar.

Para Jean Echenoz, el primer paso la novela es una búsqueda. Jean Echenoz dice que lo importante es lo que se desencadena a partir de la búsqueda, que es su motor.

En el cine tenemos ejemplos como el recurso que Hitchcock llama McGuffin: han robado unos planes ultrasecretas y a nadie le interesaen qué consisten esos planes. No importa demasiado porque lo importante es esa búsqueda que pone en marcha el engranaje de la historia.



Hacerle preguntas a tu historia es la mejor manera de asegurarse que todo el engranaje funciona correctamente.

En próximos post seguiré profundizando en cómo escribir tu novela o relato.

¿Qué tipo de novelista eres?

En este post planteo la siguiente reflexión.

El buen novelista es aquel capaz de ver, sentir, percibir la novela en los grandes y en los pequeños detalles.

El novelista debería tener un telescopio para alcanzar ver toda la magnitud de su novela, saber en todo momento qué quiere contar (estructura total). Y un microscopio para lo más infimo de su historia (palabra por palabra)

Para todo en esta vida es imprescindible conocernos a nosotros mismos, nuestras manias, hábitos personales, rutina en la que te sientas más cómodo, de todo ello también dependerá nuestra manera de ser escritor.

Hacerse un plan de trabajo es una buena estrategia.

- No dejarse llevar libremente: La idea romántica de la inspiración no sirve. Al igual que para cualquier otra actividad siempre es necesario organizarse de alguna manera.
Hay quien prefiere planificarlo todo y quien lo decide a medida que avanza. Pero internamente siempre debemos saber hacia donde vamos.

En este sentido existe dos tipos de novelistas. ¿Cuál eres tú?
  • Los novelistas de mapa.
    Que precisan de un esquema de la totalidad o parte dede la novela
  • Los novelistas de brújula
    Partir de una idea y dejar que se multiplique.
Javier Marías dijo: que algunos novelistas escriben con mapa, y otros con brújula.
«Es como ir por un camino en medio del bosque. Si tienes un mapa bien señalizado, has trazado el itinerario, vas sobre seguro, sabes en cada momento dónde estás y qué va a venir a continuación. Si vas con brújula, vas tanteando, no sabes lo que viene después, pero tienes una referencia guía, un punto de coordenadas. Normalmente, escribimos con brújula, si no tenemos la estructura bien armada de antemano. Nos vamos guiando sobre la marcha. Pero ,es importante saber dónde está el norte y el sur. Hay quienes avanzan sin brújula, fiándose de su instinto».


En otros casos el novelista empieza a escribir tomando como eje central a un personaje o un acontecimiento que resulta atractivo. A partir de estos elementos escribe un relato como punto de partida o como final. Después se deja de llevar y lo que ocurre hasta llegar a esa idea lo va "improvisando" sobre la marcha.

Dice Paul Auster: «Tardo mucho porque para mi el párrafo es la unidad de la novela, el verso de la novela. No puedo pasar al siguiente párrafo si no he terminado el anterior. El libro sale según
lo escribo, no puedo planificar, no tengo una estructura fija. Siempre empiezo por el principio, algo que puede parecer obvio pero que no lo es para muchos escritores. Nunca dejo blancos en
medio, una palabra me lleva a otra, y un párrafo al siguiente. Sé como será el sentido y la forma de la novela pero nada más. Tengo una íntima relación con los personajes, los conozco, pero lo que les ocurre va surgiendo poco a poco».

Antes de escribir.

Una novela se escribe desde dentro y surge como una estampida incontrolable de ideas. Es un proceso que tiene que ver con algo espiritual del cuerpo y del alma. En ocasiones atrapa al escritor y le invade en su intimidad, en sus sueños y sus pesadillas. Sin darse cuenta un mundo peculiar que se confunde con lo real le atrapa en otras vidas que forman parte de él mismo.

Todo ello precisa ser escrito. De alguna manera la novela utiliza al escritor como un medio para salir a la luz. Y el escritor debe saber escuchar a los personajes a la acción. Quizá esta sea una idea muy romántica que habría matizaremos más adelante.

«No es el novelista quien hace la novela, es la novela que se hace sola, y el novelista no es más que el instrumento de su venida al mundo, su partero», dice Michel Butor.

¿Y cómo activar la capacidad para novelar esa historia? ¿Cómo empezar la novela?

Aunque en un principio es necesaria una pasión y un impulso, el siguiente paso es darle forma y racionalidad a lo que queremos contar. Para eso es imprescindible el oficio y el trabajo. Saber que lo qué queremos contar debe estar estructurado y elaborado. La inquietud y la constancia son la clave para que un proyecto se haga realidad.

En una novela se entremezclan muchos elementos de realidad, de ficción, autobiográficos, sueños... La clave para que eso se traduzca en una novela es el duro trabajo, la constancia y la paciencia con uno mismo.

Empezar a escribir sin miedo a equivocarte. A partir de esos errores aprenderás a escribir y a mejorar día a día. No pretendas ser Dan Brown desde el primer día.

Responde a las siguientes preguntas

¿Qué quieres contar? ¿Qué pretendes decir? ¿Cual es tu idea? ¿De qué va la novela?

Para escribir no existen recetas mágicas. Pero si hay algo importante son estás tres premisas.

Paciencia, Constancia, Humildad.

¿Qué quieres contar?

En este post quisiera comentar algunos aspectos importantes en el momento de embarcarse en la aventura de la escritura. En las próximas semanas subiré otros post que trataran aspectos relacinados con el proceso de escritura de una novela, que quiero compartir con la blogosfera.

Cuándo das el paso de escribir una historia siempre se busca crear un efecto sobre el lector, a partir de algo que queremos contar, y necesitamos sacar de dentro de nosotros.

Todos tenemos historias que contar, y la voluntad de dar el paso de embarcarse en el deseo de darlo a conocer, sin tapujos, es el primer paso. Voy a escribir. Ese es el primer y gran paso que hay que dar.

Después habrá que enriquecer esa historia, darle el final adecuado. Buscar las alternativas a la historia para encontrar qué es lo mejor que podemos contar. En muchas ocasiones el escritor se encasilla en la idea inicial y eso es un gran error. Puede que el resultado final no se parezca en nada a la primera idea, pero eso se debe a que toda historia nace, crece y se transforma.

Tenemos que crear hilos que construyen ese universo particular, con una coherencia interna y una misión clara, cautivar al lector desde el principio.

Pero el escritor también se transforma al escribir. Digamos que es una relación donde todos salen ganando. La historia porque crecerá poco a poco hasta ser todo lo buena que se pretenda, y el escritor no será el mismo después de escribir su novela o su relato.

¿Cómo empezar? ¿Cómo mantener el interés del lector y cómo acabar la historia?

Plantearse la futura novela es un proyecto personal y de alguna manera es necesario enamorarse de la historia. El resultado final dependerá de la mezcla entre el dominio de los recursos técnicos y de la voluntad, capacidad de sacrificio y constancia en el trabajo.

La forma de trabajar varía según cada escritor y cada historia. Últimamente prefiero escribir directamente en PDA y después repasar el resultado en el ordenador. Pero cualquier sistema es válido si se obtienen resultados.

En los próximos post indagaré en el proceso creativo y los recursos que son de gran utilidad para el novelista. Al mismo tiempo trataré de aplicar todo ello a mi propia experiencia y comentaros mis impresiones.

De todas formas recuerda que para escribir al igual que cualquier otra cosa el límite para alcanzar algo siempre lo pones tú.